El impacto medioambiental de los productos de limpieza

En nuestro día a día estamos rodeados de productos químicos y perjudiciales para nuestra salud, como los productos de limpieza de alfombras o de cualquier otro producto presente en nuestro hogar. En la actualidad, estamos acostumbrados a tener más cuidado y mirar las etiquetas en cuanto a ingredientes se refiere, en los que están integrados en nuestra alimentación, pero hay que prestarles más atención a otros productos que usamos a diario.

Un ejemplo de ello son los productos de belleza, que nos lo aplicamos directamente sobre la piel o los productos de limpieza de los cuales percibimos su olor. Por lo tanto, son perjudiciales para nuestra salud y para los que nos rodean.

Pero, ¿para que un producto de limpieza funcione debe ser tóxico? La respuesta es no. Existen en el mercado artículos para limpiar tu hogar o empresa ecológicos, que respetan el medioambiente y no son dañinos para el cuerpo humano. Cada vez más, en empresas como grandes cadenas de apartamentos como villagrancanaria y hoteles utilizan este tipo de productos ya que son establecimientos donde conviven muchas personas en todas las épocas del año.

¿En qué te debes fijar al comprar productos de limpieza?

Lejía, antical, detergentes, refrigerantes, desinfectantes, desatascadores, limpiadores: vajillas, hornos, cristales y suelos, son los productos de limpieza más tóxicos y dañinos para el planeta.

Los puntos a tener en cuenta a la hora de consumir productos de limpieza para que no sean perjudiciales son:

• Biodegradable para que no cause daños en el agua.

• Eutrofización. Significa que su componente agota el oxígeno en el agua, provocando daños en la fauna acuática y generando muy mal olor.

• Blanqueadores. Este aspecto es el más peligroso y al que más se le tiene que prestar atención a la hora de comprar un producto de limpieza ya que causa enfermedades como el cáncer. Esto es debido a que estas sustancias no se pueden metabolizar, se acumulan en los tejidos de los seres vivos.

• Antibacteriales. Principal aspecto que daña la vida bacteriana del agua.

Algunos compuestos que debes evitar al comprar un producto de limpieza si no quieres dañar el medioambiente:

• Los tensoactivos en productos como los detergentes, sirven para deshacerse de la grasa y que circule por el agua de manera más rápida. Pero a su vez, forma espuma y esto significa que es tóxico para el agua, disminuyendo la difusión del oxígeno atmosférico y aumentando la toxicidad de algunos compuestos en el agua.

• Glutaraldehído. Este compuesto es altamente alérgico para la piel, causando en ocasiones alegrías, conjuntivitis y todo tipo de dermatitis.

• Formaldehído. Esta sustancia es corrosiva para los ojos, la piel y el sistema respiratorio.

ARTÍCULO RELACIONADO: Uso del VINAGRE para limpiar y AHORRAR.

Símbolos e indicaciones de peligro en los productos

Pero estos no son los únicos aspectos a tener en cuenta a la hora de comprar productos de limpieza para tu hogar, como en casi todos los artículos, existen una serie de símbolos e indicaciones de productos que indican su grado de toxicidad, entre otras cosas.

Es por esto muy importante leer las etiquetas de todos los productos y saber interpretarlas:

1. Muy tóxicos
2. Tóxicos
3. Nocivos
4. Corrosivos
5. Irritantes
6. Sensibilizantes
7. Carcinogénicos
8. Mutagénicos
9. Tóxicos para la reproducción
10. Peligrosos para el medioambiente

Como podemos comprobar, son muchos los componentes que hay que tener en cuenta a la hora de hacerte con un tipo de producto u otro. Son muy dañinos para el medioambiente, llegando a contaminar ríos, mares  e incluso océanos.

Pero por suerte tenemos  nuestra disposición una serie de productos ecológicos, aunque en ocasiones con un precio más elevados. Además, tienes que saber que con recetas naturales como usar agua, jabón suave, vinagre o jugo de limón también se limpia muy bien todas las superficies debido a su contenido desinfectante natural.

Otra solución a este problema, sería controlar la cantidad de producto que se utiliza, así que si piensas que quizá añades demasiado, reduce entre un 10 y un 20% la proporción.

En cualquier caso, lo más importante es leer bien las etiquetas y usar de manera responsable estos productos de limpieza y cualquier otro que sea perjudicial para la salud y para el medioambiente en general.